El sentirse bien, tanto a nivel físico como psíquico, depende en buena parte de lo que nos ocurre a lo largo de nuestra vida, pero la reacción de nuestro cuerpo frente a las adversidades y a las diferentes situaciones que vivimos, están plenamente condicionadas a aquellas sustancias que le aportamos.
Y si prestamos atención a de qué forma podemos aportar estas sustancias, tenemos dos. La más conocida, la alimentación. Estoy segura de que habréis leído incontables artículos de lo que es bueno y es malo, de la dieta mediterránea, de la comida vegana, la cetogénica, etc.
Pero a mí en este post me gustaría hablar de la segunda forma de aportar sustancias al organismo, y por supuesto me refiero a nuestra piel.
La piel es el órgano más grande del cuerpo y a través de ella entran sustancias de muchos tipos, muchas veces sin darnos cuenta. Por ejemplo, cuando estamos expuestos al sol, la piel absorbe vitamina A, pero también rayos UVA.
Cuando voluntariamente utilizamos cosméticos, tenemos que pensar que es como si comiéramos. Nuestro organismo va a encontrar unas sustancias que están pensadas para realizar una función, pero que si no tenemos en cuenta algunos aspectos, pueden perjudicarnos añadiendo toxicidad a nuestras células.
Por ejemplo, una desodorante contendrá unos ingredientes cuya función es la de eliminar olores indeseados, pero si para conseguirlo, entre estos ingredientes se encuentran trazas de aluminio que es tóxico, ¿te lo pondrías? Y si además existe un producto en el mercado que realiza la misma función, y cuyos ingredientes son todos naturales y ecológicos, ¿cuál elegirías? Yo por supuesto este último.
Así que cuando estéis frente a un cosmético, mirar bien la lista de ingredientes y veréis que están en más productos de los que nos pensamos.
Para los que conozcáis mejor, os dejo un listado de cuáles son los más importantes
Estos son los ingredientes tóxicos que suelen encontrarse en los cosméticos, y de los cuales deberías huir.
Fenoxietanol
El Fenoxietanol ha sido utilizado por algunas marcas de cosmética para sustituir a los parabenos como conservantes. Es un alcohol sintético aromático que tiene efecto bactericida.
También se utiliza como fijador en perfumes y en tintes para el pelo. Puede causar dermatitis de contacto y dañar el sistema reproductivo, inmunológico y nervioso.
Aluminio
Se emplea en muchos desodorantes y antitranspirantes. Puede actuar como un disruptor endocrino, que significa que puede alterar determinados ciclos hormonales. En algunos artículos se ha relacionado el aluminio con problemas de demencia y Alzheimer.
Derivados del petróleo: Parafinas y Petrolatum
Se conocen como aceites minerales, y suelen utilizarse en protectores labiales, cremas, jabones, champús y mascarillas.
Al aplicarlos sobre la piel, dan la sensación de suavidad y buena hidratación, pero su efecto es todo lo contrario. Forman una película grasa que obstruye los poros y no deja transpirar la piel, modificando su función natural.
Triclosán
Se encuentra en jabones de manos, antitranspirantes / desodorantes, limpiadores, desinfectantes para manos, dentífricos o enjuagues bucales. Es un disruptor endocrino, irritante para la piel y los ojos. Además, es muy nocivo para el ecosistema, porque es muy difícil de degradar.
Parabenos
Pueden tener multitud de variantes. Se conocen porque terminan en …parabeno. (etilparabeno, butilparabeno, etc.). Se pueden encontrar en jabones, cremas, desodorantes, champús, limpiadores faciales y exfoliantes. Son conservantes pensados para impedir el crecimiento de bacterias, moho y levaduras en los productos cosméticos. Se absorben a través de la piel, y pueden causar alteraciones endocrinas y toxicidad para el desarrollo y la reproducción.
Ftalatos
Los ftalatos se suelen encontrar en esmaltes de uñas y pintalabios. Se utilizan para aumentar la flexibilidad y la suavidad de los plásticos. Hay diferentes variantes como el ftalato de dibutilo en el esmalte de uñas, el ftalato de dietilo en perfumes y lociones, y el ftalato de dimetilo en laca para el cabello. Suelen estar en aquellos productos que tienen fragancias o perfumes. Al igual que los parabenos, son disruptores endocrinos y pueden causar toxicidad en los órganos reproductivos.
Lauril y Laureth Sulfato de sodio
El Lauril sulfato de sodio (SLS) y lauril éter sulfato de sodio (SLES) se encuentran habitualmente en jabones, champús y algunos dentífricos. Su función es la de crear espuma. Pueden provocar irritación cutánea o alergias.
Nanopartículas (nano)
Suelen encontrarse en los protectores solares químicos. Se utilizan para que el producto penetre en el interior de la piel. Entre ellos están la benzofenona, PABA, avobenzona, homosalato etoxicinamato. El dióxido de titanio, en los protectores con difusor, también suele contener nanopartículas. Actúan como disruptores endocrinos y a menudo se asocian con efectos cancerígenos.
Formaldehídos
Se encuentran en productos de higiene y cuidado personal, en algunos endurecedores de uñas y en productos de alisado del cabello.
Tiene una alta capacidad irritante y es capaz de producir alergias. Puede llegar a causar asma y toxicidad neuronal y está reconocido como cancerígeno.
Compuestos de Polietilenglicol (PEG)
Es frecuente en cremas, lociones, champús y protectores solares por la textura que aporta. Se utiliza en el mundo de la cosmética como espesante. Puede causar problemas respiratorios y son perjudiciales para la piel, ya que provocan irritación cutánea.
Butilhidroxianisol (BHA) y Butilhidroxitolueno (BHT)
Se suelen encontrar en productos para labios, productos para el cabello, maquillaje, antitranspirantes o desodorantes, fragancias y cremas. Son antioxidantes sintéticos que crean toxicidad en el sistema inmunológico, piel, sistema respiratorio e hígado. Pueden causar reacciones alérgicas y favorecer el crecimiento de tumores.
P-fenilendiamina
Se encuentra en tintes permanentes y en algunos tipos de maquillaje. Son causantes de dermatitis de contacto. En algunos casos incluso requieren intervenciones médicas.
Dietanolamina
Suele estar en geles de baño y champús. Se utilizan para hacer los productos más cremosos o espumosos. Puede afectar al sistema respiratorio y es un carcinógeno.
Siloxanos / Siliconas
Puede encontrarse en champús, humectantes y desodorantes. Se añaden a los cosméticos para hacerlos más cremosos y agradable al tacto. Derivan principalmente del petróleo. Obstruyen los poros de la piel y causan acné. Se asocian también como disruptores endocrinos que pueden causar efectos nocivos al sistema reproductivo, inmunológico y nervioso. Entre sus variantes están la Dimeticona, Ciclopentasiloxano, Ciclohexasiloxano o Fenil trimeticona.
EDTA tetrasódico
El EDTA tetrasódico se utiliza como conservante, estabilizador o quelante en mascarillas, champús, jabones, tintes y decolorantes para el cabello.
Tiene un impacto en el medio ambiente desastroso. Es dañino para la naturaleza y no es biodegradable.
Perfumes
Tras este ingrediente se incluyen más de 3.000 compuestos distintos, que suelen ser muy alergénicos.
Después de ver este listado, yo tengo muy claro que hay que apostar por una cosmética ecológica y por supuesto certificada, como es la de RINGANA. Tu cuerpo lo agradecerá.
Espero que el artículo haya sido de vuestro interés. Sí es así, estaría encantada de que pusieráis vuestros comentarios.